En el Instituto Educacional José Hernández, este viernes 27 de abril se realizó el acto para conmemorar una doble celebración: el Día Internacional de los Trabajadores y el Día de la Constitución Nacional Argentina.
Por una parte, el 1 de Mayo de 1853 se sancionó la Constitución Nacional Argentina, aprobada por asamblea una constituyente que se llevó a cabo en la ciudad de Santa Fe y estuvo integrada por representantes de 13 provincias. Por el otro, en 1889 se fijó esa fecha como Día Internacional de los Trabajadores, de acuerdo a lo establecido por el Congreso Obrero Socialista, realizado en la ciudad francesa de París, para transformar ese día en una jornada de lucha reivindicativa y de homenaje a los Mártires de Chicago.
Por ello, la institución festejó el día de todos aquellos que, con esfuerzo, espíritu positivo y creativo, dedican horas de su vida al trabajo. En tal sentido, el trabajo es la elección de una forma de vida que se asume desde la labor diaria, las exigencias, la lucha y la esperanza de un futuro mejor.
La Bandera Nacional fue portada por Abigail Wendy Jalil, quien fue escoltada por Mía Guadalupe Aragón y Melina Florencia Cabrera.
La Bandera de Córdoba, en tanto, estuvo en manos de Gabriel Mira (1° año «C»), escoltado por Martina Olmos (1° año «B») y Tomás Martínez (1° año «A»).
El trabajo dignifica a las personas, hace la vida más humana y permite que el hombre satisfaga sus necesidades y las de los demás. Por ello, la profesora Claudia Boccamazzo tuvo a su cargo uno de los discursos del acto.
El 1 de Mayo se conmemora en todo el mundo el Día del Trabajador. La fecha se instituyó en el Congreso Internacional de los Trabajadores, realizado en 1889 en París. En este contexto, es importante recordar que la celebración tuvo un origen dramático, ya que se fijó, en buena medida, para recordar los disturbios sangrientos ocurridos en 1886 en la ciudad estadounidense de Chicago. En ese marco, alumnos, docentes y directivos compartieron un video.
Posteriormente, la profesora Florencia Albarracín dedicó unas palabras para recordar la sanción de la Constitución Nacional.
De hecho, se ha declarado el 1 de Mayo como el «Día de la Constitución Nacional», en conmemoración a la fecha en que se sancionó la carta magna, que es la segunda constitución más antigua de América luego de la norteamericana. Ella nos recuerda que nuestra Patria se gestó no solamente en los campos de batalla, sino también como resultado de estudios, investigaciones, debates y consensos que se plasmaron en aquella histórica Convención Constituyente de 1853.
Y es esta Constitución, en su artículo 14 bis, la que dice que el trabajo, en sus diversas formas, gozará de la protección de las leyes, las que asegurarán al trabajador condiciones dignas y retribución justa, entre otras cosas.
Asimismo, el acto sirvió para reconocer la existencia de innumerables actividades que, a pesar de no formar parte del circuito productivo, son de esencial relevancia y tienen grandes implicancias en términos del bienestar familiar. Así, por ejemplo, vale pensar el tiempo de trabajo no remunerado que dedican las familias, especialmente las mujeres, a actividades como cocinar, limpiar y cuidar niños, hechos que no sólo constituyen grandes actos de amor, sino que deberían ser reconocidos como trabajo no pago. Las alumnas Julieta Urquiza y Renata Sablich, alumnas de sexto año, se expresaron e hicieron referencia a esos trabajos cotidianos.
Tan variados e innumerables son los trabajos cotidianos que se desarrollan como las personas con fuerza de voluntad que los realizan. Aun cuando seguramente quedaron sin incluirse muchas actividades, se proyectó un video -editado por el alumno Axel Cariddi- con innumerables actividades laborales con las cuales nos encontramos a diario.
Por último, alumnas de 4° año «B» y 6° año «A» interpretaron la canción «La vida es un vals» y se expresaron a través del arte para darle forma al cierre del acto.
