Con un acto conjunto montado sobre los ejes de la danza moderna y el humor, el Instituto Educacional José Hernández celebró, este martes 3 de julio, tanto el 445° aniversario de la fundación de la ciudad de Córdoba como el 202° aniversario de la Declaración de la Independencia nacional.
El acto fue organizado por los profesores Florencia Gásquez, Leonardo Galán Reynoso y José Luis Navarro, y contó con la participación de 80 alumnos de cuarto, quinto y sexto año. La puesta en escena artística tuvo seis cuadros fijos y uno itinerante.
La Bandera Nacional fue portada por Abigail Jalil, quien estuvo acompañada por las escoltas Mía Guadalupe Aragón y Florencia Fernández.
La Bandera de Córdoba ingresó al acto en manos de Efraín Emiliano Barahona, quien fue escoltado por Julieta Carolina Rojo y Milena Gaite.
Las palabras alusivas a la jornada clave del 9 de Julio de 1816 estuvieron a cargo de la profesora Florencia Gásquez. En su discurso, la docente destacó que la Independencia diluyó las ataduras y la sumisión a todo designio extranjero y puso de manifiesto la vocación suprema del pueblo. En ese plano, resaltó que debemos enfocarnos en rescatar los significados más profundos de aquellos días, para lograr una visión reflexiva y crítica aun cuando vivamos en una sociedad vertiginosa y compleja.
Al mismo tiempo, manifestó el deseo de construir una Argentina más unida, más orgullosa de sus raíces, consciente de su patrimonio histórico y cultural. Asimismo, planteó que la conmemoración de la Independencia debería permitirnos abrir un gran foro público sobre ideas y valores como libertad, autonomía, democracia, descentralización, ciudadanía, diversidad, multiculturalidad, desarrollo sustentable.
Al momento de centrarse sobre el aniversario de la Fundación de Córdoba, el acto dio paso al Himno Nacional cantado en vivo y con coreografías de alumnos, para lo cual se gestionó un permiso especial de Inspección.
Dentro del esquema general del acto, el primer cuadro presentado fue «Las estatuas y el hada». Se trató de una fantasía en la cual dos hadas -una estatua representa la independencia y la otra, la libertad- se encontraban abandonadas en un depósito. No obstante, un hada loca e hiperquinética les dio vida y dio paso a un final inesperado.
Luego, el segundo cuadro se centró en la música de Córdoba: se denominó «Homenaje a Ciriaco Ortiz», estuvo ambientado con un bandoneón puesto sobre un banco y brilló con luz propia cuando Agustina y Lucas, exalumnos de la institución egresados en 2015, bailaron el tango «Por una cabeza».
En el tercer cuadro, la Córdoba romántica homenajeó a «Jardín Florido», con una introducción en la cual se discutió si era un «piropeador» o un «acosador», lo que permitió plantear una problemática de discusión actual. El cuadro fue desarrollado por alumnas que bailaban con fantasmas que luego se corporizaron con varones que ingresaron a escena. Todo ello ocurrió alrededor de un banco sobre el cual lucían un sombrero, un bastón y una flor, algunas de las particulares señales de «Jardín Florido».
Posteriormente, el cuarto cuadro se denominó «Las luchas de Córdoba», como recuerdo y homenaje de Agustín «el Gringo» Tosco, uno de los principales líderes sindicales que proclamaron palabras y hechos decisivos durante «el Cordobazo». En dicha presentación artística, los alumnos ingresaron al salón desde una simulada calle, en manifestación, y se ubicaron frente al palco improvisado, en el cual Tosco brindó parte de su discurso pronunciado el 29 de mayo de 1969.
El homenaje a la revista Hortensia, y a su creador Alberto Cognigni, le dio color al quinto acto, con referencias ineludibles a personajes de la mítica publicación humorística cordobesa: «Negrazón» y «Chaveta». Con la aparición de «la Pelada de la Cañada», el cuadro se hizo desopilante, en especial por los diálogos de los personajes.
Asimismo, el cuadro itinerante tuvo tres entradas en distintos momentos del acto, con la aparición de Jerónimo Luis de Cabrera y sus porteadores. En este número, el fundador de Córdoba lució como un personaje despistado, con acompañantes que cargaban cajas de fernet y estaban vestidos con camisetas de equipos de fútbol de Córdoba. En ese marco, Jerónimo mantuvo graciosos intercambios con el conductor del acto, hasta que, en un cuadro bizarro, fundó la ciudad de Córdoba.
Vale destacar que los días 4 y 5 de julio están completamente dedicados a los exámenes de julio, sin dictado de clases, y el viernes 6 de julio es feriado, por el aniversario de la Fundación de Córdoba. El receso invernal escolar se extenderá del 9 al 20 de julio. Las actividades habituales serán retomadas el lunes 23.