El 10 de octubre se cumplieron 85 años de la inauguración de la Fábrica Militar de Aviones, uno de los íconos de Córdoba durante décadas, que abrió sus puertas en 1927 bajo la presidencia de Marcelo Torcuato de Alvear. La misma creció en los albores de la aviación y en principio sólo construyó aeronaves bajo licencias europeas, pero ya en 1931 diseñaba y producía sus propios aviones. El primero de ellos protagonizó, en 1933, un histórico vuelo entre Buenos Aires y Río de Janeiro.
Desde 1927 fueron diseñados 58 aviones y 25 modelos entraron en producción.
Asimismo, la FMA fue decana en el desarrollo tecnológico argentino, diseñando y construyendo los primeros aviones a reacción de Latinoamérica en las décadas de 1940 y 1950, además de haber dirigido el desarrollo de otras industrias nacionales como la automotriz y la aeroespacial.
Fue, además, una de las primeras de América Latina y a mediados del siglo pasado se convirtió en un formidable polo de desarrollo industrial que llegó a producir, entre otros, uno de los primeros aviones militares a reacción, el Pulqui I. Esta experiencia sirvió de base para el desarrollo del Pulqui II, uno de los más veloces del mundo (ver video de Canal Encuentro).
En 1995, la Fábrica de Aviones fue concesionada, por el presidente Carlos Menem, al conglomerado industrial norteamericano Lockheed Martin Aircraft. A partir de allí la empresa abandonó la política de fabricación y desarrollo para concentrarse en las actividades de mantenimiento.
En 2009, durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, el Estado Nacional adquirió las acciones de la sociedad, reconociendo el patrimonio neto a la concesionaria, con lo cual el establecimiento volvió a manos del Gobierno argentino.
ENLACES COMPLEMENTARIOS
> Fábrica Argentina de Aviones (ex Fábrica Militar de Aviones) en Wikipedia